La crisis impacta en la calle Florida: más de 500 locales cerraron
Hace siete meses, la calle Florida, una de las más emblemáticas de Buenos Aires, y polo comercial en la Ciudad, muestra un panorama muy extraño. No tiene aglomeraciones de personas, nadie la camina a las apuradas o haciendo zigzag ni tampoco se escucha el típico acento de otra lengua. Peor aún: los locales, que sabían renovar sus vidrieras permanentemente, muestran hoy el dramático impacto de la crisis económica.
Se estima que 500 tiendas cerraron en la calle Florida en lo que va del año, si se tiene en cuenta las galerías que agrupaban muchos de ellos. Cada vez con más frecuencia se ven carteles de «liquidación total por cierre» o directamente «se alquila», en un escenario que podría compararse con la terapia intensiva o directamente la «muerte» del paciente, no evitando nunca los cuadros de gravedad.
En declaraciones a TN, Héctor López, titular de la «Asociación Amigos de la Calle Florida», puso en palabras cómo se vive la situación, y describió algunas de las causas que permiten que un ícono porteño muestre su cara más triste. «Esto es un espanto», dijo.
«Solo si hacemos un golpe de ojos tenes una mueblería, una casa de cambios y un local de artesanías cerrados», comentó. «Muchas de las tiendas estaban orientadas al turismo, y no recibimos visitantes desde marzo por las restricciones», señaló López como uno de los motivos principales de esta realidad. Sumado a ello, la falta de oficinistas, que eran otros de los clientes de la zona. «Prácticamente todas las empresas usan el teletrabajo con todos o la mayoría de los empleados, entonces tampoco tenemos ingresos desde allí», señaló el hombre.
«Hoy estamos en un 15 por ciento de lo que solíamos vender», puntualizó el titular de la «Asociación Amigos de la Calle Florida». De los locales que lograron por el momento evitar la situación crítica, «muchos son propietarios» y tienen que correr con menos urgencia que los inquilinos, señaló. Otros, en tanto, lograron una negociación con los dueños de los negocios que alquilan y únicamente abonan las expensas o consiguieron un período de gracia en el pago del alquiler.
Una de las problemáticas, por otro lado, está en el tema crediticio. «Es muy difícil. A veces nos piden hasta la hipoteca del local», contó Héctor López. De cara al tramo final de este 2020, el comerciante fue, de todos modos, algo optimista en las declaraciones mencionadas.
«Esperamos que ahora con la vuelta del turismo interno podamos recuperar algo. Nosotros trabajamos mucho con los turistas de las provincias», expresó. Los viajes en micro o avión estarán permitidos en forma inminente en el país luego del aval del Gobierno nacional.