La ley es prácticamente nula y los alquileres suben sin freno
El legislador (MC) y ex candidato a Jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, Gabriel Solano, se refirió al aumento de los alquileres que comenzará a regir desde el mes próximo tal como establece la ley 27.541 impulsada y votada por el oficialismo en el Congreso Nacional. Solano señaló:
“El aumento de los alquileres, que oscilará entre el 38 y el 40% a partir es un golpe demoledor a decenas de miles de trabajadores y familias que carecen de una vivienda propia.
El porcentaje del aumento está por encima de la inmensa mayoría de las paritarias, lo que conlleva que un inquilino deberá utilizar una porción mayor de su salario para pagar el alquiler de la vivienda, quedándole menos ingresos para afrontar el resto de sus gastos, sea alimentos, transporte, educación, etc. Esto es el resultado de la ley 27.541 impulsada y votada por el oficialismo, que estableció una fórmula que contempla en partes iguales el índice de inflación y de salarios (RIPTE). Pero como la inflación creció por encima de los salarios, la fórmula resultante arroja un porcentaje de aumentos por encima de éstos”.
“El ajuste en marcha y los desequilibrios económicos del país agravan la crisis habitacional. Con inmuebles dolarizados y salarios pesificados, la posibilidad de acceder a una vivienda se ha convertido en una misión imposible.
En la actualidad la cantidad de salarios necesarios para acceder a una vivienda de 60 metros cuadrados promedia los 330, cuando la media histórica en el país era de entre 40 y 50. Así las cosas, un trabajador debe disponer la totalidad de su salario durante 27 años para comprar una vivienda de 60 metros cuadrados en la Ciudad de Buenos Aires”.
Gabriel Solano continuó: “Como los alquileres están relacionados con el valor de la propiedad medida en dólares, su incremento ha superado no solo el aumento de los salarios sino también la inflación –el año pasado los aumentos fueron del 70%.
Un último reporte elaborado por inmobiliarias da cuenta que un alquiler de un departamento de dos ambientes en la Ciudad de Buenos Aires fue en mayo de $ 37.575 y de tres ambientes de $ 52.152. Un incremento del 40% de estos valores supone representa para muchas familias la casi totalidad de sus ingresos, porque además debe agregarse los gastos de expensas, servicios e impuestos”.
“Aunque la entrada en vigencia del aumento establecido por esta ley tendrá un impacto negativo en todo el país, los sectores más afectados serán quienes viven en grandes ciudades, comenzado por la Ciudad de Buenos Aires, donde la burbuja inmobiliaria ha sido especialmente intensa.
Ni que hablar que esto significa un gran revés para la juventud que quiere independizarse y tener su propia vivienda, y para muchos trabajadores que se ven expulsados directamente de la Ciudad aun cuando trabajan en ella”.
Gabriel Solano finalizó: “La salida a esta situación supone comenzar por una recomposición salarial generalizada; proceder a poner en marcha un plan de viviendas utilizando para ello la tierra pública disponible para lo cual es necesario revisar el remate de terrenos ejecutado por los últimos gobiernos y que en el caso de la Ciudad alcanza casi 500 hectáreas; establecer un impuesto progresivo a la vivienda ociosa y al capital inmobiliario; un plan de créditos hipotecarios a tasas