Achican los plazos de aislamiento y el tiempo entre vacunas en pleno rebrote de coronavirus
La Argentina experimenta la tercera ola de coronavirus, con picos de casos en la mayoría de los distritos. La Ciudad Autónoma de Buenos Aires no es la excepción en ello, y registró más de 7000 contagios diarios en la última jornada. Ante este panorama, el Gobierno porteño dio a conocer una serie de modificaciones en su política sanitaria, basadas en sugerencias de las autoridades nacionales.
Por un lado, se decidió acortar en un mes el plazo mínimo entre la aplicación de la segunda dosis y la dosis de refuerzo de la vacuna contra el coronavirus. Tal como precisó en conferencia de prensa el jefe de Gobierno, Horacio Rodríguez Larreta, ahora habrá que aguardar un intervalo de cuatro meses y no de cinco como hasta ahora, buscando acelerar la cifra de personas que concurran a reforzar los anticuerpos y mantener la inmunidad de un fármaco que ha dado resultado, según muestran las cifras de fallecimientos, que no suben a la misma velocidad que los contagios en esta etapa de la pandemia.
Asimismo, se modificaron los tiempos de aislamiento obligatorio, tanto para los contactos estrechos de positivos como para los casos confirmados leves de COVID-19. Desde ahora serán de 5 y 7 días respectivamente, reduciendo las jornadas bajo esa condición, al demostrarse que los contagios con estas variantes no se dan más allá del quinto día. Estas medidas regirán únicamente para aquellos que estén vacunados con dos dosis; las personas que no hayan recibido dos componentes deberán cumplir con los 10 días como hasta ahora.
Por otro lado, el Gobierno porteño informó la apertura de un nuevo gran centro de testeo, el cual estará situado desde este 30 de diciembre en Parque Roca. Asimismo, desde el viernes serán ocho las Unidades Móviles de Testeo. Ante la inminencia de las jornadas festivas de Año Nuevo, se dispuso un cronograma especial que amplía el horario de atención el jueves 30 y la garantiza el viernes 31 y sábado 1 en los centros de testeo.
El último informe oficial muestra un aumento sostenido de casos en el territorio porteño. Hace 2 semanas el promedio diario era de 880, hoy el promedio de los últimos 10 días asciende a 2.448. Sin embargo, aún está lejos de verse algún riesgo de saturación en los centros de salud. La Terapia intensiva muestra un 5,6% de camas ocupadas, lo que equivale a 34 de 600 disponibles. Los cuadros moderados tienen 3,6% de ocupación, al tener en esa condición 55 camas ocupadas de 1.500 disponibles. En cuanto a las leves, hay 123 con pacientes de 5.000 camas disponibles, lo que implica un 2,4 por ciento.