La gastronomía y el sector de salud no tendrán que pagar Ingresos Brutos el próximo trimestre
La Legislatura de la Ciudad de Buenos Aires aprobó en la sesión del último jueves 13 de mayo un proyecto que exime del pago de los Ingresos Brutos a uno de los sectores más afectados por las medidas de restricción dispuestas ante la segunda ola de coronavirus. A la vez, sumó a la medida a otro sector, el sanitario, que lleva a cuestas la atención y el cuidado de infectados, que suman más de 630 mil desde que comenzó la pandemia en el territorio porteño.
La ley aprobada había sido presentada por el legislador Marcelo Guouman (UCR Capital). Este dirigente oficialista había pedido que la Ciudad exima del pago del Impuesto a los Ingresos Brutos durante mayo, junio y julio a estos rubros de la economía, para ayudarlos a sobrellevar la crisis. La gastronomía sufrió las últimas medidas, dado que la obligó a recortar la jornada y finalizar la atención a clientes a las 19 horas, antes del horario nocturno. Si bien se admite la venta por delivery o retirando en el lugar, no se logra compensar las pérdidas por tener las persianas cerradas.
“Sabemos del esfuerzo de miles empresarios, emprendedores y trabajadores y es momento de acompañar”, destacó Guouman, quien festejó la aprobación de la ley en sus redes sociales. Entre los sectores que podrán acogerse a este beneficio, se encuentran:
-Servicios de restaurantes y cantinas sin espectáculo
– Servicios de restaurantes y cantinas con espectáculo
– Servicios de “fast food” y locales de venta de comidas y bebidas al paso
– Servicio de expendio de bebidas en bares
– Servicio de expendio de comidas y bebidas en establecimientos con servicio de mesa y/o en mostrador.
– Servicio de expendio de helados.
Según el cálculo del proyecto de ley, son cerca de 10 mil locales, que emplean a cerca de 50 mil personas en la Ciudad.
Beneficio a sanatorios
Asimismo, la Legislatura dio también su aval a otro proyecto similar, presentado en este caso por la también oficialista Ana María Bou Pérez. El mismo dispuso que las clínicas y sanatorios porteños no tendrán la obligación de pagar las cuotas correspondientes a mayo y junio 2021 del impuesto de Ingresos Brutos por los servicios de internación.
La intención es “colaborar con el mencionado sector y brindar alivio fiscal a los contribuyentes que desarrollan dichas actividades para que puedan seguir combatiendo y paliando los efectos adversos de la actual emergencia sanitaria”, explicaron en los argumentos del proyecto.
A la misma podrá acogerse todo el sector sanitario, a excepción de las “instituciones relacionadas con la salud mental”, detalló el texto aprobado.