La Ciudad clausuró a más de 250 bares desde que comenzó la pandemia
Las medidas de restricción a la circulación dispuestas desde 2020 para evitar brotes de contagios estuvieron en muchos momentos acompañadas por un férreo operativo para controlar su cumplimiento. El sector de la nocturnidad fue allí uno de los más seguidos de cerca por la Policía de la Ciudad, y esta semana se informó que en el territorio porteño se llevaron a cabo más de 250 clausuras a bares en lo que va de este tiempo especial.
La cifra implica un promedio de dos y medio por semana, pero la distribución no es pareja: 180 de las mismas se hicieron en este 2021. Es que si bien se fueron progresivamente levantando las normas que restringieron la circulación, la actividad nocturna está aún con fuertes limitaciones. El escenario de pubs, boliches o bares repletos de asistentes no puede permitirse y por ello ante el hallazgo de una anormalidad, se prosigue con la drástica decisión de clausurar.
La Agencia Gubernamental de Control, la Policía de la Ciudad y el Cuerpo de Investigaciones Judiciales son las fuerzas y organismos que tienen a su cargo el control del cumplimiento del protocolo. El mismo prevé limitaciones a la capacidad (incluso en otros momentos, prohibió por completo que se utilicen espacios internos, algo ahora permitido pero con un aforo bajo). A su vez, está restringido el horario: por ahora ningún local de este tipo puede seguir abierto después de la medianoche.
El otro gran inconveniente son las fiestas clandestinas. Si bien no están vinculadas a algún local comercial y se hacen en domicilios particulares, al encontrarse una, comienza un operativo para desactivarlas. Sin embargo, el modus operandi de las mismas atenta contra la posibilidad de hallar rápido uno de estos festejos, ya que sus organizadores y asistentes manejan con mucho misterio la ubicación exacta.
A su vez, otras fiestas se hacen en los bares, como si la pandemia no existiera. En el último fin de semana largo, por caso, se cerraron dos lugares donde se desarrollaban este tipo de festejos masivos, totalmente prohibidos durante la pandemia. Uno de los hechos ocurrió en un local ubicado en la calle Vera al 500, en el barrio de Villa Crespo, donde había gran cantidad de personas sin el mínimo distanciamiento y fuera de los horarios permitidos. Según precisó el gobierno de la Ciudad, el organizador fue detenido, y la Agencia Gubernamental decomisó mesas, equipos de música, luces y una barra de tragos.
El segundo episodio se registró en un local gastronómico situado en Honduras al 5500, en el barrio de Palermo, donde se hallaban más de 80 personas sin tapabocas ni distancia.